Un Reglamento Escandaloso








FE DE ERRATAS: DICE: “Tener relaciones sexuales con personas del mismo género, que causen escándalo o menoscaben la imagen institucional” DEBE DECIR: “Tener relaciones sexuales que causen escándalo o menoscaben la imagen institucional”









Se trata del Decreto Legislativo 1150 que hoy acaba de rectificarse a través de una Fe de Erratas y que no presentaba un error de redacción sino de concepción de las sanciones impuestas. Sin embargo la presión mediática consiguió que se subsane lo escandaloso, dejando de lado otro tema que resultaba más importante y tiene que ver con la consistencia de las sanciones.

Carlos Bruce, se quejaba y con razón de lo discriminatorio que podía ser castigar a un policía por ser homosexual “escandaloso”. Y aunque no me imagino un policía caminando con tacos altos y pestañas postizas. Ya el término “escándalo” traía problemas cuando pensamos entonces que toda conducta era aceptada mientras se mantuviera “caleta” es decir escondida.

El “escándalo” es un fenómeno interesante magnificado por el poder de los medios. Hay conductas o situaciones que pueden ser presentadas como escandalosas, si es que el arte mediático apunta correctamente y hace click con la opinión pública. En el escabroso mundillo político, existen cerebros que permanentemente buscan presentar o construir estos elementos. Muchos psicosociales tienen que ver con esta naturaleza, que estudia las percepciones o el imaginario cultural y social de la gente. Por lo tanto un término así resulta siempre peligroso sobretodo en una época donde el periodismo amarillo intensifica el escándalo para venta de sus medios.

En general se debe castigar la conducta impropia o que deshonra la institución, y me pregunto si no es más dañino un policía que maltrata permanentemente a su mujer o a sus hijos, psicológica o físicamente. El Reglamento penaliza esta conducta con una sanción de rigor de 11 a 15 días, mientras en el caso de “relaciones sexuales escandalosas” se le destituye del cargo. ¿No debería ser al revés?, puesto que una conducta escandalosa puede ser rectificada. En cambio, un hombre o mujer acostumbrado a tener un carácter violento, requiere un tratamiento de largo aliento para cambiar el hábito que lo conduce a la violencia y daña su entorno. Cientos de testimonios de hijos que emocionalmente han perdido sus posibilidades de desarrollo total por la violencia de sus hogares lo señalan.

El Reglamento en mención muestra un pobre análisis de la realidad policial y de lo que debemos rectificar. Las personas que no tienen autodominio lo muestran cotidianamente en varios de sus aspectos relacionales. Policías borrachos, coimeros, autoritarios, violentos que han hecho que la institución policial no sea una de las más respetadas en el país. Hubiese sido un espectacular triunfo de las organizaciones que defienden la “mujer” no haber atendido tanto el escándalo y pedir una mayor severidad cuando se trate de esposas o hijos de policías maltratados.

Por un Perú digno, justo y solidario
Jorge Marquez Chahu
Presidente Escuela de Carácter y Ciudadanía

Nota: Modifican norma que sancionaba a los policia gays.
http://ojo.pe/ojo/nota.php?t=corrigen-norma-sobre-sancion-a-policias-homosexuales&txtSecci_id=51&txtNota_id=736098

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