Un “rey” para los otorongos

El día de ayer en una de las elecciones que causaron mayor expectativa mediática se eligió al Presidente del Congreso, en medio de escandaletes y negociados que lejos de mejorar la imagen del alicaido poder del Estado, deja un sentimiento de perdida de valor ya no sólo por el carácter de la elección sino también por el elegido. El nuevo Presidente del Congreso no es nada más y nada menos que el mismo que apareció hace pocos meses en fotos detestables para una autoridad que nos representa a todos los peruanos. Pero al mismo tiempo la dinámica de la elección y la grabación del diálogo de los congresistas deja traslucir el negociado de los partidos para acceder al control parlamentario y que tiene que ver con la forma en la que se esta guiando el país.

¿Cuántos compromisos existen ahora que se tendrán que satisfacer? ¿Cuántas leyes con nombre propio? ¿Cuántas evasiones de fiscalización? ¿Cuántos blindajes?. Y es que como dijo el congresista Torres Caro “ninguno de los congresistas, incluído yo, (dice él) pensamos en el Perú”. Palabras cínicas que reflejan el tipo de Congreso que tenemos, pero al mismo tiempo el tipo de política que obsevamos. Era Torres Caro en la casa del actual Presidente del Congreso Javier Velasquez Quesquen a quien un tiempo atrás “reto a duelo” por ser acusado de pasar las famosas fotografias a la revista Caretas.

De esta manera los bien llamados “otorongos” tienen su rey y nosotros los ciudadanos que si pensamos en el Perú y lo amamos, un sentimiento de indignación. Me pregunto que hubiese pasado si existiera una renovación por tercios, seguramente personajes como el congresista Velasquez no estarían ya en el Congreso. Y ¿si las elecciones de Presidente no se hicieran de parte de los propios congresistas, ni por los partidos políticos? sino de forma voluntaria por los ciudadanos, no estableceríamos una nueva conexión entre el Congreso y la sociedad a quien por teoría representa pero que la realidad muestra que su interés está muy lejos de ella, por mantener sus privilegios de grupo. Definitivamente hay congresistas que si resaltan por su seriedad y moral en varias bancadas y seguramente muchos ciudadanos pueden conocer además su trayectoria como hombres y mujeres de bien. Pienso en Mirta Lazo de Alianza Parlamentaria o Rosa Venegas de UPP, o Luis Galarreta del PPC o en Washington Zeballos. Claro ninguno de ellos calificado por no tener experiencia en negociados. El momento es difícil y las instancias políticas y estatales desde el Presidente de la República han perdido el valor y respeto que deben tener. Este es un momento que los ciudadanos como nosotros debemos pedir un cambio verdadero que dignifique nuestro país y que realce instancias con personas que fortalezcan con su conocimiento pero sobretodo con su valor moral la esperanza en un país que se merece no sólo ser desarrollado sino fundamentalmente respetable.

Por un Perú Digno
Felices Fiestas Patrias
Jorge Márquez Chahú
Regidor Metropolitano