SE FOMENTA LA CORRUPCION Y LA EVASION DE TRIBUTOS EN EL CONGRESO

Como se recordará meses atrás, en medio de los escándalos generados por trabajadores fantasmas, familiares contratados y porcentajes cobrados por los congresistas a sus propios empleados, AEQUUS PERU, entidad cristiana que viene observando los temas de corrupción, el 17 de mayo a través de su Presidente el Sr. Jorge Márquez Chahú, remitió una propuesta modificatoria al Reglamento, a la entonces Presidenta Sra. Mercedes Cabanillas, donde se solicitaba que el porcentaje a rendir cuenta no fuera del 30% que se establecía en el Reglamento vigente, sino el 90%, tal y como se viene haciendo en varias entidades estatales. La propuesta tenía como sustento en principio que el gasto operativo no es remuneración y sobre el mismo se debe rendir cuenta tal y como lo establece el propio Reglamento:

f) (…) Los montos entregados a los Congresistas para los fines previstos en el párrafo anterior, están sujetos a rendición de cuentas, por constituir gastos operativos del Congreso

Por otro lado es un hecho que los congresistas utilizaban ese dinero a fin de contratar personas que nadie conocía y que no estaban en planilla, recortándoles todo derecho laboral o lo tomaban como parte de su remuneración lo cual iba en contra de las normas establecidas. Se insistía además que ningún congresista debería realizar una contratación directa así sea con su propio pecunio sino que toda contratación debería realizarse a través del área de recursos humanos. Se solicitaba así la confección de una planilla única y de la publicación de los comprobantes del gasto efectuado por los congresistas. La falta de control administrativo ha llevado a tener los consabidos trabajadores fantasmas, así como profesionales subempleados que tienen que devolver a los congresistas parte del monto recibido y a tener otros trabajadores considerados sólo como “servicios no personales” eliminándoles todo derecho laboral. Dichas figuras no sólo configuran actos corruptos sino que paradójicamente nos llevan a plantear que en el Congreso se evaden tributos.

El mes de agosto la Pdta. del Congreso establece por acuerdo del Consejo Directivo, una sustentación del 90% que tiene corta duración debido a que justamente los congresistas no utilizan dichos montos para los denominados “gastos operativos”. El actual Pdte. del Congreso fiel a su política de negociaciones que poco favor le hacen al sentido ético, muestra la real piel de un Congreso falto de figuras morales que puedan alzar su voz aunque sea minoritaria, para encontrar de que es posible tener representantes más dignos de los que tenemos.

AEQUUS PERU viene evaluando la posibilidad de que el tema sea visto por la nueva Oficina Nacional Anticorrupción y solicitará en función de la Ley de Transparencia una detallada información de los gastos de los congresistas.